Una corte federal del Distrito Este de Nueva York acusa 13 pandilleros de alto rango y afirma que funcionarios del gobierno de Bukele y su partido Nuevas Ideas negociaron en secreto con la MS-13.
El tribunal estadounidense afirma que la mara salvatrucha MS-13 no solo ha tenido el control de gran parte del territorio, sino, también obtener beneficios económicos.
Según este documento desclasificado, la semana pasada, el poder que ejerce en el país le permitió desde el 2012, negociar en secreto con los representantes del gobierno anteriores y la administración Bukele no ha sido la excepción.
El informe judicial dice que el partido Nuevas Ideas y funcionarios de gobierno salvadoreño negociaron con la MS-13, una estructura criminal que cobró la vida de miles de salvadoreños, mientras que otros se vieron en la necesidad de abandonar sus hogares por miedo a ser asesinados.
Además, se señala que después de las elecciones del 2019, líderes de la Ranfla Nacional mantuvieron numerosas reuniones dentro de las prisiones de máxima seguridad, específicamente en Izalco y Zacatecoluca.
En esos encuentros, dice la investigación de los EE.UU. funcionarios de Bukele, entre ellos Osiris Luna, director de Centros Penales y Carlos Marroquín, director de Tejido Social, fueron los mediadores con los líderes de la mara salvatrucha.
La información revela que Luna y Marroquín, entraron a pandilleros en libertad, a las cárceles con identificación de oficiales de inteligencia falsas y disfrazados para no ser reconocidos por el personal penitenciarios.
Además, en la documentación se subraya que el gobierno facilitó el traslado temporal de pandilleros a hospitales para recibir supuestos tratamientos, sin tener condiciones médicas que lo justificara. El objetivo era que éstos se comunicaran con pandilleros libres para dar las directrices del pacto.
De acuerdo con la justicia estadounidense, las negociaciones entre el gobierno de Bukele y la MS-13 contemplaba beneficios financieros, dinero en efectivo, mantener el control de territorios, acordaron mejoras de las condiciones carcelarias y que éstas fueran menos restrictivas, reformas legislativas y judiciales para la reducción de penas y rechazos de extradiciones de sus líderes.
Las condiciones del gobierno se centraron en la reducción de asesinatos para impulsar el liderazgo de Bukele y mantener una falsa percepción de haber logrado reducir los homicidios, pero la realidad es que la MS-13 seguía asesinando y ocultando los cuerpos de las víctimas.
Con este acuerdo, Bukele obtuvo el apoyo de las pandillas para que sus candidatos a diputados y alcaldes ganaran las elecciones del 20221, gracias a la influencia en los barrios bajo su control.
Hasta el momento, no hay pronunciamiento del presidente ni de sus funcionarios sobre estas acusaciones. Este silencio es interpretado como “el que calla, otorga”, aduciendo que los señalamientos son ciertos.
Otros sostienen que el gobierno estaría preparando una cortina de humo para aplacar las acusaciones de Estados Unidos y señalarlos de interferir en los asuntos internos.
“Rayito de sol” para los líderes de la MS-13
En marzo del 2020, el mandatario ordenó a Osiris Luna, decretar emergencia máxima en los centros penales debido al alza de homicidios y escribió en su cuenta de twitter que “ni un rayo de sol para nadie”, cero visitas, todos en sus celdas incomunicados 24/7 hasta nueva orden”.
Sin embargo, esto no aplicó para Élmer Canales Rivera, alias “Crook”, un peligroso e influyente cabecilla de la Mara Salvatrucha, que salió de la prisión de máxima seguridad de Zacatecoluca, departamento de La Paz, en noviembre 2021.
De acuerdo con el registro oficial el “Crook”, condenado por secuestro, ya no guardaba prisión en el sistema penitenciario del país, a pesar de la solicitud de extradición.
Al pandillero se le acusaba de cometer actos de terrorismo que trascienden las fronteras nacionales, conspiración para financiar el terrorismo y conspiración de narcoterrorismo.
La investigación del Faro cita que Canales Rivera recibió la ayuda del director de Tejido Social, Carlos Marroquín, quien lo hospedó en un lujoso apartamento en una zona de la colonia Escalón y a principios de 2022 lo transportó hasta Guatemala rumbo a México.
Otra investigación periodística de la Revista Gato Encerrado también reveló que los 14 cabecillas reclamados por Estados Unidos, cuatro fueron excarcelados (inactivos por libertad) entre junio de 2021 y enero de 2022, entre ellos, el “Crook”
Eduardo Erazo Nolasco, alias “Colocho”, Efraín Cortez, alias “Tigre” y Moisés Humberto Rivera Luna, alias “Viejo Santos”, son los otros pandilleros a los que el gobierno de Bukele los liberó.
Tanto el “Crook”, “Colocho” y el “Viejo Santos” cuenta en su contra con la Orden Ejecutiva número 13581 del Departamento del Tesoro que congela sus bienes en suelo estadounidense.
La confirmación de Estados Unidos sobre las negociaciones secretas del gobierno de Bukele, ha sido como “pólvora” en los medios internacionales, mientras que en locales tradicionales el abordaje de la noticia fue superficial por temor a ser clausurados.