Los profesionales de salud ahora son criminalizados por participar en una protesta laboral en apoyo a dos doctores suspendidos en mayo pasado.
El gobierno de Nayib Bukele utilizó a los “héroes de blanco” políticamente para mantener una imagen positiva durante la pandemia, incluso alardeó indemnizar a los familiares de los médicos que perdieron la vida para salvar a otros. Sin embargo, es una deuda que pesa sobre el mandatario.
Hoy el personal de primera línea que batalló con el covid-19 es amenazado por participar de una protesta laboral en apoyo a dos de sus colegas suspendidos tras la estampida en el estadio Cuscatlán en mayo pasado.
El paro temporal de al menos 47 internos del hospital Rosales no afectó la atención de los pacientes y llamaron al ministro de Salud, Francisco Alabí a dialogar para el reinstalo de las médicas y que han sido víctimas de difamación, maltrato psicológico y verbal.
Tras esta acción, Salud giró instrucciones para prohibir el ingreso de médicos internos, destituyendo a 12 de ellos, justificando que actuaba de acuerdo con la Ley del Servicio Civil.
“Este tipo de acción, siempre que tenga un impacto negativo o afecte a los pacientes, no puede permitirse en la razón de ser de nuestra institución”, se detalló en el comunicado.
Además, la misma institución hizo una convocatoria el pasado 21 de julio para la contratación de médicos y especialistas. “Si eres médico general o especialista en cualquier rama de la medicina y quieres unirte al objetivo de salvaguardar la vida de los salvadoreños, déjanos conocerte. Forma parte de nuestro talento humano…”
Por su parte, el Colegio Médico dijo que el gremio está siendo agredido por las autoridades de Salud y calificó la medida gubernamental como acciones que violentan los derechos humanos, laborales y a la educación del personal médico en formación.
El apoyo también vino del Sindicato de Médicos Trabajadores del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (SIMETRISSS) y exhortó al gremio medio a estar unido.” Debemos mantener la unidad granítica y estar listos y atentos al llamado que se pueda hacer”, sentenció el secretario general del sindicato, Rafael Aguirre.
Los galenos despedidos recibieron el respaldo de Socorro Jurídico Humanitario y se sumaron a la condena colectiva por “el despido y suspensión arbitraria de personal médico del Hospital Nacional Rosales”.
De igual manera la Unidad Nacional de Trabajadores, Organizaciones Sociales y Populares de El Salvador (Unitrasal), aclaró que fueron 47 médicos internos suspendidos de manera arbitraria.
De acuerdo con las organizaciones, se ha cometido “abuso de poder y excesos cometidos contra todo el personal de salud” durante la pandemia, provocando la renuncia de especialista del sistema de salud nacional.
Según Unitrasal, el gobierno “está debilitando el área de residencia médica, condenando a la población a buscar otras formas de atender y resolver problemas de afectación a su salud…
Esta acción arbitraria evidencia que el gobierno del presidente Bukele busca castigar y reprimir el derecho a protesta y legítima demanda que tienen todas las personas salvadoreñas, aunque trabajen en instituciones del Estado”. https://www.elsalvador.com/noticias/nacional/hospital-rosales-ministerio-de-salud-medicos-especialistas-colegio-medico-isss-/1077506/2023/
