Durante su campaña, Nayib Bukele condenó la reelección presidencial del hondureño Juan Orando Hernández y la de Daniel Ortega a quienes llamó “dictadores”.  Su reelección sería ilegal y peligrosa.

La popularidad del presidente salvadoreño es aprovechada para mentir descaradamente a la población a fin de mantenerse en el poder por otro período presidencial.

Su camino a la reelección está sin tropiezos, ya  que a fuerza de reformas a la Constitución, al Código Electoral, el voto en el exterior, entre otras estrategias políticas, garantiza su permanencia en el Ejecutivo.

La última aprobada el pasado 15 de marzo, la cual permite efectuar cambios en las reglas del proceso electoral, por ejemplo, realizar en el transcurso del presente año cambios en la división administrativa de El Salvador para las futuras votaciones (reducción de municipios y diputados).

Su objetivo es asegurar el gane y para Bukele, no hay limitantes constitucionales, porque violentarlas es la práctica cotidiana de los grupos de poder que controlan la casa Presidencial, aún cuando los mismos Bukeles , incluyendo al padre, Armando Bukele, condenaban cualquier intento de reelección.

El jurista, Antonio Durán,  señaló que la reelección es inminente aunque lo prohíba la constitución y agrega que el  nivel de aprobación se debe a la millonaria campaña que  ha montado desde la Secretaria de Comunicaciones de la Presidencia a la que llamó “ ministerio de propaganda”.

“La propaganda y publicidad tiene una enorme influencia en la población”, afirmó Durán, quien mencionó varios ejemplos de dictadores que han manipulado la opinión pública a base de mentiras. “Hitler pudo manipular las mentes de un pueblo tan culto como el alemán”, manifestó durante una entrevista televisiva.

Durán calificó la reelección de Bukele como un acto inconstitucional habilitado por los actuales magistrados de la Sala de lo Constitucional, a quienes tildó de “prevaricadores”, por haber firmado una resolución a sabiendas de que es ilegal, con la cual se avala y se ordena al Tribunal Supremo Electoral para que no se oponga a la candidatura de Bukele.

Asimismo, llamó a Bukele “mitómano”, por su tendencia a mentir y hacer ofrecimientos que luego no cumple. El profesional  recordó por ejemplo, la promesa de poner en órbita un satélite y la construcción de varias escuelas por día, lo cual no ha cumplido, recalcó.

La mitomanía, también conocida como pseudología fantástica, es un trastorno psicológico que consiste en una conducta repetitiva del acto de mentir. La persona mitómana suele mentir de manera espontánea con el fin de conseguir beneficios como atención, admiración o bien evitar un castigo.

Otra de las críticas hacia el mandatario, es la falta de transparencia en su gobierno, donde la opacidad en el manejo de la gestión pública y la rendición de cuentas es un indicador de la corrupción que hay existente.

En el 2020, el vicepresidente Félix Ulloa negó que el presidente Nayib Bukele buscara una reforma para su reelección, incluso el mismo presidente aseguró que era respetuoso de la Constitución y que en sus planes no estaba reelegirse.

“La Constitución no permite que la misma persona sea presidente dos veces seguidas”, dijo Nayib Bukele en 2013 al ser consultado sobre la reelección y agregó que la Constitución de El Salvador no permitía para garantizar que una sola persona no se mantenga en el poder. https://www.youtube.com/watch?v=fwTJXBs4C74

Esta afirmación la dijo durante una entrevista en el programa nicaraguense, el Bar del Patico, cuando el entrevistador le comenta que en Nicaragua la ley tampoco permitía la reelección pero que luego de algunas reformas ya era permitido.

La respuesta del entonces alcalde Bukele, reiteró que en El Salvador eso no era posible. “La Constitución no permite que la misma persona sea presidente dos veces seguidas. Puede ser presidente 80 veces si quiere, pero no seguidas”, manifestó Bukele,

El director ejecutivo de Nuestro Tiempo, Andy Failer,  precisó  que si “logra reelegirse de forma inconstitucional, vamos a ver otra faceta de Bukele y probablemente mucho más agresiva, mucho más represiva, que responda o que encaje ya con todos los atributos en el perfil de un dictador”.

Un artículo publicado en el periódico digital El País, titulado “La Metamorfosis de Nayib Bukele: un poder envenenado”, presenta al gobernante salvadoreño como un

tecnócrata capaz de aliviar los sufrimientos de su país a un mandatario autoritario, que desprecia las leyes y los derechos humanos.

 

“Cuando se consume la reelección se va a acrecentar el nivel de represión contra las posiciones críticas y la sociedad civil organizada”, pronostica el analista  César Artiga, asegurando que vienen años más difíciles para El Salvador.

La población que no está a favor de la reelección hizo referencia al dicho popular: “soldado avisado no muere en guerra”, refiriéndose a que al conocer las circunstancias a las que se va a enfrentar, se puede preparar mejor para el desafío que le espera y así lograr sobrevivir.