El oficialismo percibe una pérdida de votos para concejos municipales y diputaciones en el 2024, por eso propone menos diputados y municipalidades para asegurar el gane.
Aunque la mayoría dice aprobar un segundo periodo de Nayib Bukele, este dato parece no convencer al presidente, sobre todo porque en la última encuesta de la Universidad Francisco Gavidia, el apoyo al mandatario bajó más del 12 puntos.
Esa confianza que pregona ha ido mermando ante el incumplimiento de sus promesas, abusos de poder y violación a los derechos humanos, incluso los salvadoreños que radican fuera del país, sobre todo en los Estados Unidos están declinando a dar su voto nuevamente.
Sin embargo, Bukele no quiere correr ningún riesgo y ha impulsado reformas para cerrarle el camino a la oposición, que de acuerdo a él, es insignificante, pero que le quita el sueño.
Para ello, tomó el control de los tres poderes del Estado para asegurar su triunfo, comenzando con la reforma de la Sala de lo Constitucional que avaló su reelección, ignorando a la misma Carta Magna, tomó el control del Centro Nacional de Registro de las Personas Naturales, el Tribunal Supremo Electoral e impulsa el voto electrónico en el exterior, todo esto supervisado por el oficialismo.
Además, ha recurrido a varias tácticas, entre ellas, el régimen de excepción, empadronamiento de extranjeros y la campaña adelantada que promueve inconstitucionalmente la reelección.
La última estrategia política anunciada, es la propuesta para la reducción de municipios y diputados para concentrar todo el poder, que le aseguraría el gane por segundo período.
Según el director de Acción Ciudadana, Eduardo Escobar, esta estrategia es un “cálculo político” y con ello le resta oportunidades a los partidos mediados y pequeños.
El mismo análisis hace el abogado constitucionalista Enrique Anaya, quien “considera que detrás de estas propuestas hay una necesidad electoral, con certeza ellos han apreciado que podrían seguramente perder municipios”.
De acuerdo con Anaya, el oficialismo prevé que podrían perder votos para concejos municipales y diputaciones de cara a las elecciones generales del 2024, por lo que estas propuestas buscan impedir que opositores al gobierno de Bukele logren obtener cargos públicos.
El analista político, Jorge Villacorta, también opina que reducir los diputados y municipios es un interés estrictamente electoral y no un interés de desarrollo en beneficio del país.
Por su parte, el abogado constitucionalista Jonathan Sisco, considera que eliminar municipios puede fomentar actos de corrupción y el fraude electoral por medio de gerrymandering (manipulación de circunscripciones).
Todas estas estrategias dejan claro que al gobierno sí le preocupa no ganar las elecciones y el fraude electoral es considerado un hecho, no solo por la oposición, sino que así lo ven las organizaciones de la sociedad civil.